Visiones

Que linda tarde la que hoy tenemos. Sin duda alguna pareciese que yo jamás hubiese visto un sol tan resplandeciente. Pareciese que jamás haya visto aquellas nubes en forma de borregos flotando al aire libre como si nada les preocupase. Lindo aquél pequeño camellón que veo siempre que voy por mi casa y el cual me hace desear estar simplemente acostado sin ninguna preocupación compartiendo una parte de mí contigo.

Me gusta tu presencia, tu sonrisa y felicidad; cosas dichosas que me has hecho sentir desde hace una semana que decidimos caminar juntos bajo aquel sol y nubes que vagan dirigidas por el viento como si fueran invidentes. Una lluvia contigo es como un simple día soleado en donde todo está en paz y me hace recordar aquellos paisajes que he visto en mi realidad y en mis sueños. ¿Podré algún día recordar qué es la felicidad y la paz? lo has hecho poco a poco. Siete meses de conocernos, una semana de ser algo más que amigos. No cabe duda que después de haber sufrido, las cosas cambien como si fuera una metamorfosis de un nuevo ser a otro.

Solo me resta esperar a los dictámenes del juez tiempo para ver si te veré feliz o simplemente quedará el vacio. Solo quiero verte, hacerte, y sentirte feliz; no pido mucho para ver no solo que tan capaz soy de hacer feliz a alguien, sino para ver que tan feliz puedo ser yo. La noche cae y todo oscurece, solo queda una luz de un faro fuera de mi casa, pero el hecho de pensar en tí hace que la noche sea día y que éste jamás termine.